En el sendero Latitud Cero, sector del farallón de la Reserva Natural Kapari, se encuentra uno de los mejores lek del país para observar al inigualable Golden-Winged Manakin.
El lek es una agrupación de machos que compiten por el apareamiento de las hembras. Los machos no suelen ocuparse de la descendencia, únicamente se reúnen en lugares específicos, dentro del bosque, para ser escogidos por las hembras. Este espacio funciona en el sotobosque gran parte del año, pero se vuelve más activo entre febrero y marzo.
Cuando las alas de esta ave están cerradas, luce completamente negro y crea un contraste con su penacho frontal crestado -amarillo dorado- que llega hasta por detrás de su cabeza. Además, de una franja delgada color concho de vino y fuego (según el ángulo de la luz), en conjunto con cachuditos emplumados de color negro (como pequeñas orejitas), que están ubicados en los laterales de su cabeza.
Las plumas que están de bajo de las alas (parte interna) son de un llamativo color amarillo dorado. También, oculta otro amarillo debajo de su garganta, que solo lo muestra para exhibirlo a las hembras en su lek. Tarsos son de color concho de vino, iris marrón y pico cuerno grisáceo.
Con información de Francisco Sornoza Molina, director de Conservación de la Reserva Natural Kapari.